En entrevista el Lic. Jaime Yarasca Cipriano,
resaltó, la obra educativa adventista en el Perú, la misma que se inició en el
altiplano puneño con la influencia del pionero peruano Manuel Zuñiga Camacho y
los extranjeros Fernando y Ana Stahl, de nacionalidad Norteamericana, quienes
decidieron educar a los indígenas a pesar de la intolerancia que imperaba a
inicios del siglo pasado.
La escuelita clandestina que se instaló en
UTAWILAYA, en la Región Puno fue el inicio de un cambio en beneficio de los
peruano más humildes, luego Fernando y Ana Sthal, pasaron por toda la Selva
Central, dejando establecidos colegios en la Región Junín, y en la
incontrastable ciudad de Huancayo. Es así que en el año 1956 un grupo de hermanos
adventistas del séptimo día, inspirados en los pioneros decidieron organizar la
existencia de una escuela primaria, autorizados con R.M. N° 1848, dado en la
ciudad de Lima el 22 de febrero de 1956, que con el transcurrir del tiempo se convirtió
en lo que ahora es “Colegio Adventista Huancayo”.
Con el único afán de ofrecer a los estudiantes una
educación cristiana integral fundamentada en la restauración del hombre a la
imagen de Dios y el fortalecimiento de todas sus facultades. En estos 62 años
de vida institucional el Colegio Adventista Huancayo ha cosechado lauros
académicos y deportivos y así a lo largo toda la historia han egresado muchas
promociones que han contribuido en la sociedad huancaína y en todo el país,
siempre enarbolando con sus actos la educación impartida en sus aulas.
Finalmente como parte de la semana de los 107 años
de la educación adventista en el Perú, en agradecimiento a Dios, se ha llevado
el mensaje de esperanza a las madres del PVL de Pilcomayo, y en diferentes
medios radiales y televisivos, recordando que la Educación Cristiana integral,
desarrolla principios, valores y destrezas en las áreas: cognitiva, física,
social y espiritual, resaltó Jaime Yarasca